**Lleva varios días sin operar por falta de mantenimiento y no hay visos de repararlo; a la delegada estatal le preocupa más su futuro político.

Irineo Pérez Melo

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6 de Diciembre del 2017.  Por la falta de mantenimiento, el equipo de Rayos X de la Clínica Hospital del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), desde hace varios se encuentra descompuesto, por lo que cientos de pacientes no pueden ser atendidos con la oportunidad que su problema de salud representa.

Molestos porque no reciben la atención médica correspondiente, además de enfrentar el agendar su cita, hasta por un mes, para realizarse estos estudios, tienen que superar estos inconvenientes que se les presentan, con lo cual echan por tierra los buenos deseos de la delegada estatal Elizabeth Morales García, quien en reiteradas ocasiones señala que todo marcha sobre ruedas en el ISSSTE.

Sin embargo, la realidad es otra, los pacientes sufren esta situación, porque al no poder realizarse los estudios, el tratamiento de sus enfermedades se aplaza, con las consecuencias que ello les motiva a su integridad física, y más al desconocer el tiempo que llevará arreglar el desperfecto del equipo mencionado.

Los empleados, un poco avergonzados por este problema del que no es responsabilidad de ellos, refieren que en esta semana se trabaja con un equipo portátil, pero que resulta inoperante por el cúmulo de pacientes que se tienen que atender cotidianamente.

Con el equipo de Rayos X portátil solo se pueden tomar radiografías de mano, brazo y tórax, otro tipo de radiografías no se pueden realizar, se indicó.

Anteriormente, recuerda un paciente que tuvo que regresarse, para otra ocasión realizarse el estudio radiológico, el instituto subvencionaba el servicio y el paciente era atendido de manera particular y el problema quedaba zanjado, y el derechohabiente podía seguir con su tratamiento médico y en caso de requerir alguna cirugía, programarla de manera oportuna.

Se informó que esta situación ya es del conocimiento de la delegada estatal del ISSSTE, sin embargo, le preocupa más su situación política que no escatima ningún recurso para hacer notar su presencia en eventos de su partido y hasta paga acarreados y batucadas para echarle porras, mientras, los derechohabientes sufren en carne propia, la falta de equipo y medicamentos en las clínicas y hospitales del instituto.